Washington, D.C., 29 de septiembre del 2016 (OPS/OMS) - Dado que cada año surgen nuevas enfermedades, que están en aumento los fenómenos climáticos graves y que hay un gran número de personas que viven en zonas proclives a los desastres, los países de la Región de las Américas deben estar preparados ahora más que nunca para responder a las emergencias de salud.

Con ese fin, los líderes de salud de la Región han respaldado un marco para poner en marcha iniciativas integradas a fin de que los sistemas de salud sean más resilientes en las emergencias de salud futuras. Este respaldo tuvo lugar en ocasión del 55.º Consejo Directivo de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).

"Una de las enseñanzas clave que el mundo aprendió a raíz de la epidemia del ébola fue que los sistemas de salud frágiles -aquellos sistemas que no pueden satisfacer las necesidades de salud de las personas en circunstancias normales- no pueden hacer frente eficazmente a las epidemias u otras emergencias de salud", explicó James Fitzgerald, director del Departamento de Sistemas y Servicios de Salud de la OPS. "La preparación requiere más que planes de emergencia y simulacros. Significa fortalecer otros aspectos centrales de los sistemas de salud, desde los recursos humanos y el acceso a los medicamentos hasta los sistemas de información de salud, e incluso medidas legales que apoyen la acción en el ámbito de la salud pública", consideró.

El nuevo marco de "sistemas de salud resilientes" fue elaborado por la OPS a fin de aplicar un enfoque integrado a la cooperación técnica que brinda a los países en las áreas de preparativos para casos de desastre, reducción de riesgos y respuesta; vigilancia de enfermedades y manejo de brotes; y fortalecimiento de los sistemas de salud y la salud universal, incluso con respecto a la gobernanza y la regulación del sector de la salud.

En el marco se hace un llamamiento a la acción y a la inversión en todas estas áreas, dentro del contexto más amplio del desarrollo sostenible que fomenta el desarrollo humano, la participación social y la estabilidad económica y social.

Asimismo, se insta a los países a que sigan fortaleciendo su aplicación del Reglamento Sanitario Internacional (RSI), las normas acordadas internacionalmente que rigen la manera en que los países deben notificar y responder a brotes imprevistos y otros eventos de salud pública de posible importancia internacional. La aplicación del RSI debe abordarse como un proceso holístico e incorporarse en la formulación y planificación de las políticas nacionales, la acción legislativa y los marcos normativos. Debe incluir mejoras en la organización de los servicios de salud para apoyar la prevención y el control de las infecciones, fortalecer las redes de vigilancia de salud y la capacidad en materia de laboratorios, y desarrollar las competencias del personal de salud en el ámbito de la respuesta a brotes y emergencias..

En el marco se subraya que es fundamental invertir en los servicios de atención primaria de salud y asegurar que estos servicios estén disponibles universalmente y vinculados en redes que sean "adaptables y receptivas".

También se debe asegurar que haya capacidad de reserva, con el suministro necesario de personal de salud apropiado y de financiamiento, medicamentos y tecnologías sanitarias para permitir que se pueda rápidamente ampliar la escala de los servicios de salud durante eventos de salud agudos o sostenidos.

"La premisa es que invertir en la resiliencia de los sistemas de salud es considerablemente más costoeficiente que financiar la respuesta a las emergencias", afirmó Fitzgerald. "Sin embargo, un enfoque fragmentado no es suficiente. Tenemos que abordar tanto los desastres tradicionales y los riesgos de enfermedades como los riesgos internos y externos a más largo plazo que afectan la capacidad de los sistemas de salud de responder bien en circunstancias normales y en las emergencias de salud."

El Consejo Directivo de la OPS reúne a los ministros de Salud y a los delegados de alto nivel de los países miembros de la OPS/OMS en Washington, D.C., Estados Unidos, con el fin de debatir y analizar políticas de salud, y fijar las prioridades de los programas de cooperación técnica de la OPS, y la colaboración en salud pública a nivel regional.


Enlaces

Los sistemas de salud resilientes
55.o Consejo Directivo de la OPS