Washington, D.C., 26 de abril de 2024 – Durante la pandemia de COVID-19, la OPS/OMS apoyó al Gobierno de Costa Rica implementando un proceso de participación comunitaria y acción intersectorial para impulsar la Atención Primaria de Salud (APS) en 24 cantones del país. El enfoque tuvo éxito y está siendo desarrollado para la APS postpandemia, en colaboración con las instituciones de salud y las municipalidades, para acelerar aún más el progreso hacia los ODS relacionados con la salud en el país.
Financiamiento del Plan de Acción Global para la Vida Sana y el Bienestar (GAP ODS3) se está utilizando para consolidar plataformas que facilitan el intercambio interinstitucional de conocimientos e información, en el marco de procesos participativos comunitarios. Esta iniciativa busca abordar en Costa Rica desafíos como la desigualdad, que se ha visto intensificada por el impacto socioeconómico de la pandemia por COVID-19.
Construyendo sobre colaboraciones existentes
Dirigidos por los gobiernos locales, se crearon o identificaron comités intersectoriales ya existentes para identificar y priorizar los determinantes sociales de la salud que afectan a la comunidad, varios de los cuales se vieron potenciados por la pandemia. Se están elaborando y aplicando planes de acción intersectoriales para hacer frente a esos retos mediante un enfoque dirigido por la APS. Un aspecto central de la iniciativa ha sido garantizar la integración de los servicios de atención sanitaria, que prestan principalmente la Caja Costarricense de Seguro Social y el Ministerio de Salud.
Con la ayuda de fondos catalizadores proporcionados a través del SDG3 GAP, se han realizado talleres para formar a líderes comunitarios en salud mental comunitaria, violencia de género y autocuidado de enfermedades no transmisibles (ENT). El elemento de violencia de género del proyecto se desarrolló en el contexto de una colaboración previa con el UNFPA y el Grupo Interinstitucional de las Naciones Unidas sobre Género, que depende de la Oficina del Coordinador Residente de las Naciones Unidas en Costa Rica e incluye a UNICEF, el UNFPA y el PNUD.
En este contexto, en 2023 se formaron 150 nuevos líderes comunitarios en zonas prioritarias para el Ministerio de Salud, sumándose a los 250 formados en iteraciones anteriores de la iniciativa. Estos líderes comunitarios recibieron capacitación y herramientas necesarias para identificar y abordar problemas de la comunidad, difundir información y crear planes de acción en colaboración con y para las comunidades. El proyecto se trabaja estrechamente con el Ministerio de Salud para garantizar la alineación con las estrategias y planes nacionales.
“Me llevo mucha información sobre la violencia intrafamiliar y de género. Que en cada una puede haber solución, de ayuda, de levantar la voz y no quedarse callada y decir no más violencia intrafamiliar y violencia de género”, dice Kristel, de Bahía Ballena, una de las líderes comunitarias formadas.
Varias comunidades fueron seleccionadas para establecer redes de apoyo destinadas a prevenir la violencia de género. Esta iniciativa facilitó una mayor conexión entre el Ministerio de Salud y a la Caja Costarricense de Seguro Social con las comunidades locales, lo que aumentó la capacidad de respuesta y adaptación a las necesidades de la comunidad.
A principios de 2023, los organismos signatarios del GAP del ODS3 liberaron otra ronda de financiación catalizadora para fortalecer aún más la colaboración entre las partes interesadas, establecer comités intersectoriales adicionales y capacitar a más líderes comunitarios en temas de salud mental y violencia de género. El resultado fue un fortalecimiento de la capacidad para responder a las necesidades de las comunidades locales en la lucha contra los problemas de salud mental y violencia de género. Uno de los componentes clave de este proyecto es la incorporación de un modelo de Formador de Formadores, que permite a los líderes comunitarios continuar la formación de forma independiente para garantizar la sostenibilidad.
Grupo Interinstitucional sobre Género
Para sensibilizar a más personas sobre la violencia de género, la oficina del Coordinador Residente de la ONU apoya la colaboración interagencial a través del Grupo Interinstitucional sobre Género. OPS/OMS ha unido fuerzas con Mujeres Unidas en Salud y Desarrollo (MUSADE, una organización comunitaria local), el PNUD y la Oficina de Derechos Humanos de la ONU para producir campañas de sensibilización contra la VG, incluyendo una serie de podcasts que se publicaron en los 16 Días de Activismo de la ONU contra la Violencia de Género en 2022, en los que se hacía un llamamiento a: 'Unidos para poner fin a la violencia contra las niñas, las adolescentes y las mujeres adultas'.
En 2023, junto con MUSADE y el PNUD, se publicó una serie de programas de radio sobre los mitos y estereotipos de las masculinidades hegemónicas y el papel de los hombres para acabar con la violencia contra las mujeres y el feminicidio.
Los programas de radio desarrollados se consideran un medio de comunicación eficaz y de libre acceso en los hogares donde la violencia doméstica y de género es más frecuente. La campaña de comunicación ha facilitado el acceso a la información a las familias, además de sensibilizar a los hombres sobre la necesidad de redefinir su masculinidad en la sociedad.
La Coordinadora Residente de la ONU en Costa Rica afirma: “Ciertamente, esta importante campaña no solo transmitió un poderoso mensaje a una amplia audiencia para prevenir la violencia contra las mujeres, sino que también sirve como un claro modelo de cómo la colaboración en grupos de trabajo, como el grupo de Género, puede optimizar la eficiencia en la utilización de recursos y fortalecer la acción para avanzar en la Agenda 2030 y los derechos humanos en Costa Rica”.
¿Qué es el GAP del ODS3?
El Plan de Acción Mundial para una Vida Sana y Bienestar para Todos (GAP ODS3) es un conjunto de compromisos de 13 organismos que desempeñan un papel importante en la salud, el desarrollo y las respuestas humanitarias para ayudar a los países a acelerar el progreso hacia las metas de los ODS relacionadas con la salud. El valor añadido del GAP ODS3 radica en el refuerzo de la colaboración entre los organismos para emprender acciones conjuntas y proporcionar un apoyo más coordinado en consonancia con los planes y estrategias nacionales, que son propiedad y están dirigidos por los propios países.