En el marco de la cooperación entre la Organización Panamericana de la Salud/ Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS), el Centro Latinoamericano de Perinatología, Salud de la Mujer, y Reproductiva (CLAP/SMR) y el Gobierno de Canadá, se desarrolló en Colombia el taller nacional de entrenamiento a entrenadores en emergencias obstétricas como parte del proyecto “Cero Muertes Maternas por Emergencias Obstétricas”, dirigido a profesionales de salud que intervienen en la atención directa de las gestantes, especialmente, a obstetras de los hospitales priorizados por el plan de aceleración y la estrategia hospital padrino.
La capacitación que se desarrolló en Bogotá entre los días 1 y 2 de marzo contó con la participación de 42 ginecobstetras en representación de 17 departamentos del país, seleccionados como referentes de los hospitales padrino de los territorios priorizados. Entre los contenidos abordados se destacan el plan de aceleración para la reducción de la mortalidad materna en Colombia, sistemas de alerta temprana, la organización de los servicios para tratar emergencias, factores humanos (habilidades no técnicas) y código rojo obstétrico, entre otros.
En coordinación con el Ministerio de Salud y Protección Social, y en contribución a las líneas estratégicas priorizadas en el plan de aceleración para la reducción de la mortalidad materna en el país, el taller se realizó por medio de ejercicios de simulación que permiten transferir capacidades médicas y no médicas para mejorar la calidad de la atención de diversas emergencias obstétricas, mediante la capacitación de entrenadores que posteriormente serán parte de los equipos encargados de realizar el fortalecimiento de las capacidades de los recursos humanos de los hospitales seleccionados del país.
La mortalidad materna es un indicador que no solo refleja el estado de salud de la población, sino el nivel de desarrollo de un país, por considerarse muertes evitables y de mayor ocurrencia en población pobre o con mayores condiciones de vulnerabilidad. De esta forma la reducción de la mortalidad materna es la meta trazadora del Objetivo de desarrollo 3, que para Colombia se ha establecido como meta a 2030, lograr una razón de 32 muertes maternas por 100 mil nacidos vivos.
“Cada muerte materna constituye una tragedia familiar y social, estas mujeres son irremplazables en los procesos de crianza, cuidado y sostenimiento de las familias. Cuando quedan niños(as) huérfanos aumenta de manera significativa el riesgo de abandono, maltrato, abusos y vulnerabilidad, lo que incide directamente sobre el estado de salud y desarrollo de estos niños que se traducen posteriormente en indicadores de discapacidad, morbilidad y mortalidad durante la niñez, incluso las consecuencias pueden perpetuarse durante la adolescencia y la adultez, manifestándose en dificultades de adaptación, comportamiento y aceptación de normas sociales, entre otros”, explicó la representante de la OPS en Colombia, Gina Tambini Gómez.
En Colombia, la salud materna ha sido una de las prioridades más destacadas en materia de salud pública, siendo país pionero y de ejemplo en la región, por la fortaleza de su sistema de vigilancia en salud pública y el desarrollo de amplia normatividad que impulsa el desarrollo de estrategias e intervenciones individuales y colectivas promoviendo el acceso oportuno e integral a servicios de salud para las gestantes y neonatos. Sin embargo, aún persisten grandes desafíos para alcanzar las metas esperadas, siendo evidentes las brechas de acceso y las necesidades de aunar esfuerzos intersectoriales para avanzar en la afectación de los determinantes sociales en relación a la edad, pertenencia étnica, ruralidad, migración, condición de discapacidad y condiciones socioeconómicas ampliamente reconocidos por su incidencia en la ocurrencia de estos eventos.
