El objetivo del trabajo de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) en Emergencias en Salud, es incrementar la capacidad de recuperación del sector de la salud ante emergencias y desastres. Nuestra prioridad es brindar un apoyo rápido, predecible e integral a los Estados Miembros en términos de prevención, reducción de riesgos, preparación, vigilancia, respuesta y recuperación temprana en caso de cualquier amenaza para la salud humana, incluyendo brotes o desastres causados por fenómenos naturales, agentes biológicos, químicos o radiológicos, actividades humanas, conflictos o cualquier otra amenaza.
Los países de las Américas se enfrentan a un panorama complejo, con el creciente riesgo de brotes y epidemias, la persistencia de enfermedades transmisibles, el aumento de las enfermedades no transmisibles, la exposición a una amplia gama de amenazas naturales de escala y frecuencia crecientes, la aceleración de los impactos del cambio climático y desafíos socioeconómicos en constante cambio. La Región también se enfrenta a desigualdades significativas entre y dentro de los países y a una transición demográfica acelerada en América Latina y el Caribe. En este contexto, la prolongada crisis de COVID-19 exacerbó las vulnerabilidades preexistentes y empeoró las necesidades humanitarias acumuladas en toda la Región, alimentando algunos de los principales motores del desplazamiento interno y la migración.
El documento destaca las prioridades regionales de la Organización para apoyar la protección de las comunidades y poblaciones afectadas por emergencias sanitarias agudas y prolongadas en todas las Américas, comenzando por las personas en situación de vulnerabilidad.
*Disponible en inglés