Washington D.C., 10 de octubre de 2019 - El Plan de Acción para Fortalecer los Sistemas de Información para la Salud 2019-2023 fue aprobado hoy por el 57.° Consejo Directivo de la Oficina Sanitaria Panamericana / Organización Panamericana de la Salud.
Este Plan de Acción propone líneas de acción estratégicas y herramientas que apoyan la aplicación de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.
El plan fue apoyado por todos los países de la Región, y 18 representantes de los países en la reunión expresaron su apoyo antes de la aprobación: México, Argentina, Perú, Surinam, Ecuador, Cuba, Paraguay, República Dominicana, Estados Unidos, Costa Rica, Brasil, Guyana, Reino Unido/Islas Vírgenes Británicas, Canadá, Honduras, Jamaica, Uruguay y Puerto Rico.
Además de aprobar el Plan de Acción, el Consejo Directivo también instó a los países de la Región a garantizar que todas las iniciativas descritas en el plan se desarrollen y apoyen no solo a nivel nacional sino también a nivel subregional, para que puedan proporcionar mayores beneficios para la población de sus países.
En el plan de acción aprobado hoy se proponen líneas de acción estratégicas y herramientas que apoyan la aplicación de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. Además, tiene como propósito brindar apoyo a las instituciones de salud de los Estados Miembros a fin de que avancen hacia la consecución de los objetivos planteados en la Agenda de Salud Sostenible para las Américas 2018-2030, en particular las metas 6.1 y 6.2, en consonancia con otras iniciativas gubernamentales, como las de gobierno abierto o gobierno electrónico.
Este plan de acción tiene como meta fortalecer las acciones de los Estados Miembros encaminadas a mejorar los sistemas de salud a partir de la gestión de sistemas de información capaces de operar de manera interconectada e interoperable. Asimismo, apoyará a los Estados Miembros para que incorporen las tecnologías de la información y la comunicación, así como para que mejoren el intercambio de información y la gestión de datos, estructurados y no estructurados3 , en beneficio de la salud pública.
Aún que los países de la Región de las Américas tengan progresado considerablemente en cuanto a la mejora de los sistemas de información para la salud (IS4H, por su sigla en inglés), aún enfrentan desafíos importantes para que los datos sean fiables y estén protegidos, disponibles de forma oportuna y en el formato necesario, y se utilicen como evidencia para la toma de decisiones, la formulación, el monitoreo y la evaluación de políticas, así como para la producción de inteligencia para la acción en la salud. Por otro lado, las tecnologías emergentes y las posibilidades que ofrece la sociedad de la información, como los datos masivos (big data), pueden suponer beneficios para la salud pública como nunca antes en la historia de la humanidad.