Palabras de apertura del Director de la OPS – Rueda de prensa sobre ENT Julio 15, 2025

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Washington, D.C.


Buenos días y gracias por acompañarnos en esta rueda de prensa.

Con demasiada frecuencia, pensamos en la salud en términos limitados.

Pero la buena salud no solo es vital para las personas. Es un motor poderoso para la seguridad, el crecimiento económico, el desarrollo social y la prosperidad.

Impacta en nuestras economías, nuestras comunidades y nuestro futuro colectivo.

Hoy presentamos un nuevo informe de la OPS, "Una gran tormenta acecha en el horizonte", elaborado en colaboración con la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard, que deja clara esta conexión.

Los hallazgos son contundentes: entre 2020 y 2050, se proyecta que las enfermedades no transmisibles (ENT) y los trastornos de salud mental le costarán a Sudamérica más de 7,3 billones de dólares en pérdida de productividad y gasto en atención médica.

Esto se debe principalmente a muertes prematuras, discapacidades y menor participación en la fuerza laboral.

Para ponerlo en perspectiva, es el equivalente a todo el Producto Interno Bruto anual de toda América Latina y el Caribe, perdido por condiciones que se pueden prevenir o tratar.

No es una cifra abstracta: se proyectan pérdidas económicas enormes que van desde los $88 mil millones de dólares en Uruguay hasta $3,7 billones en Brasil. En algunos países, esto representa hasta un 4.5% del PIB.

Estas no son solo estadísticas de salud. Son señales de alerta fiscal.

Esta no es solo otra crisis de salud. La creciente carga de las ENT y las afecciones de salud mental se ha convertido en una emergencia económica, quizás el mayor desastre económico en salud.

Las personas que viven con enfermedades cardiovasculares, cáncer, diabetes y afecciones respiratorias crónicas están en el centro de esta tormenta.

Si bien el informe se enfoca en Sudamérica, su mensaje es válido para toda la Región y el mundo.

Los últimos datos disponibles muestran que las ENT son la principal causa de muerte en las Américas, con 6 millones de fallecimientos en 2021. Casi el 40% de estas muertes ocurrieron prematuramente, es decir, en personas menores de 70 años. Solo las enfermedades cardiovasculares y el cáncer representan más de la mitad de esas pérdidas. Mientras tanto, la diabetes está en aumento; se estima que 43 millones de personas con diabetes no pueden acceder al tratamiento que necesitan.

Los trastornos de salud mental también están aumentando, lo que genera más presión sobre los sistemas de salud y la productividad.

Este aumento de las ENT se debe, en gran parte, al envejecimiento de la población y a la exposición a factores de riesgo.

Hoy, 240 millones de personas en las Américas viven con una ENT, y todas necesitan atención continua, asequible y de calidad, comenzando por la atención primaria.

La buena noticia es que muchas de estas condiciones se pueden prevenir.

Los principales factores de riesgo —el consumo de tabaco, las dietas poco saludables, la falta de actividad física, el consumo nocivo de alcohol y la contaminación del aire— se pueden abordar.

Y las tendencias son preocupantes: Desde el año 2000, la obesidad en adultos en la región aumentó un 67,5%, la diabetes un 53,6% y la inactividad física un 24,1%.

Aproximadamente el 67,5% de los adultos en las Américas tiene sobrepeso, muy por encima del promedio mundial del 43,5%. Y la región también tiene los niveles más altos de inactividad física —35,6%, frente al 31,3% mundial.

Reducir estos riesgos es urgente y esencial. Sabemos que, con las inversiones adecuadas, es posible avanzar.

Primero, la prevención da resultados.

Desde el año 2000, la mortalidad por enfermedades cardiovasculares y cáncer ha disminuido notablemente, gracias a las políticas e innovaciones.

La Iniciativa HEARTS de la OPS, implementada actualmente en 33 países, ha ayudado a más de 5,7 millones de personas a controlar la hipertensión desde la atención primaria.

Una alimentación saludable y la actividad física regular son "medicina" efectiva contra las enfermedades no transmisibles.

Podemos prevenir hasta el 40% de los casos de cáncer si reducimos el consumo de tabaco, mejoramos la alimentación, y promovemos estilos de vida activos. Además, podemos eliminar el cáncer de cuello uterino con vacunas, detección temprana y tratamiento de lesiones precancerosas.

Segundo, el diagnóstico temprano y el acceso al tratamiento salvan vidas y fortalecen las economías.

Los sistemas de salud que detectan los riesgos para la salud a tiempo y actúan con rapidez no solo mejoran la supervivencia, sino también el bienestar económico.

La OPS está apoyando a los países a ampliar el acceso a medicamentos y diagnósticos esenciales, fortalecer sus sistemas de salud y mejorar los datos a través de nuestra Iniciativa Mejor Atención para las ENT.

Nuestros Fondos Rotatorios también están facilitando el acceso equitativo a diagnósticos, vacunas contra el VPH y tratamientos para las ENT.

Pero debemos ir más allá: solo el 36% de las personas con hipertensión la tiene bajo control, y el 57,7% de quienes viven con diabetes reciben tratamiento.

Tercero, el mundo está despertando a la amenaza de las ENT.

En septiembre, durante la Asamblea General de las Naciones Unidas, se celebrará la Cuarta Reunión de Alto Nivel sobre ENT y Salud Mental. Será una oportunidad clave para actuar.

Gobiernos, sociedad civil, academia y el sector privado se reunirán para renovar los compromisos globales y adoptar una nueva declaración política para reducir las muertes prematuras por ENT y promover el bienestar mental.

La OPS está apoyando a sus Estados Miembros con orientación técnica, consultas regionales y una nueva colección de buenas prácticas.

También necesitamos soluciones de financiamiento. Los presupuestos nacionales de salud deben priorizar las ENT y la salud mental.

Y las políticas fiscales, como los impuestos especiales sobre el tabaco, el alcohol y las bebidas azucaradas, pueden financiar reformas mientras mejoran la salud pública.

Para cerrar:

La salud es la base del desarrollo, la seguridad y la prosperidad. Y aunque el desafío es grande, aún estamos a tiempo de actuar.

Abordar las ENT y mejorar la salud mental nos ofrece un camino claro hacia un futuro mejor.

Pero requiere políticas audaces, coordinadas y basadas en datos.

Así que hoy, hago un llamado a todos los gobiernos, socios y comunidades:

Pongan la salud en el centro de sus estrategias económicas. Promuevan estilos de vida saludables. Fortalezcan las políticas fiscales y regulatorias para abordar los factores de riesgo.

Inviertan en atención primaria. Y amplíen los servicios de salud mental.

El informe que presentamos hoy nos recuerda lo que está en juego: billones de dólares en pérdidas económicas e incontables vidas.

El momento de actuar es ahora.

Muchas gracias.

Dr. Jarbas Barbosa