Lima, 17 de septiembre de 2025.- En el marco del Día Internacional de la Seguridad del Paciente 2025, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) reafirma su compromiso de colaborar con los países de la Región para reducir los daños evitables en los servicios de salud. Este año, el llamado a la acción se centra varios puntos clave: eliminar los daños prevenibles en la atención pediátrica y neonatal, dar prioridad a la seguridad del paciente y reforzar la seguridad de los trabajadores de la salud. Se invita, además, a sumar esfuerzos para aumentar la seguridad de los medicamentos, fomentar la participación de los pacientes y sus familias, y mejorar la seguridad del diagnóstico.
En el Perú, la OPS ha acompañado distintas iniciativas que contribuyen a promover una cultura de seguridad en los entornos sanitarios. Una de ellas se llevó a cabo el pasado 13 de agosto, durante la conmemoración del Día Nacional de la Salud y Buen Trato al Paciente. En este espacio, organizado por la Unidad Funcional de Gestión de Calidad en Salud del Despacho Viceministerial de Prestaciones y Aseguramiento en Salud, se abordaron temas clave como el involucramiento del paciente en el proceso de atención, la superación de la estigmatización en salud mental, la experiencia del paciente como herramienta para mejorar la atención y la importancia de una medicación segura. En esta ocasión, la OPS participó con la ponencia “Atención de salud para el buen trato”, resaltando la necesidad de integrar el respeto y la empatía como pilares fundamentales en la atención.
Otra contribución relevante estuvo vinculada a la seguridad de los pacientes y trabajadores de salud a través de la prevención de infecciones asociadas a la atención sanitaria. En el Instituto Nacional de Ciencias Neurológicas, la OPS brindó apoyo técnico durante el I Curso de Observadores de Higiene de Manos, organizado por la oficina de epidemiología. En este espacio se desarrollaron ponencias sobre la importancia de la higiene de manos como estrategia multimodal para la prevención de infecciones, el control de la resistencia antimicrobiana y la implementación de precauciones estándar en la atención. Estas acciones son esenciales para garantizar entornos seguros tanto para los pacientes como para el personal de salud.
La OPS destaca que la seguridad del paciente debe ser abordada como una cultura que impregne todos los niveles del sistema de salud. Promover prácticas seguras, fomentar el aprendizaje continuo y fortalecer la participación de pacientes, familias y equipos sanitarios son pasos fundamentales para lograr una atención más humana, segura y de calidad en beneficio de toda la población.
