Cada 10 segundos, una persona muere por causas relacionadas con el alcohol. La OMS, en colaboración con asociados internacionales, lanzó la iniciativa SAFER en 2018.
SAFER es una iniciativa y un paquete técnico de la Organización Mundia de la Salud, que apoya a los gobiernos a reducir el consumo nocivo de alcohol y las consecuencias relacionadas en salud, sociales y económicas.
"SAFER" es el acrónimo en inglés para las 5 intervenciones más costo efectivas para reducir los daños relacionados con el alcohol.
La promulgación y el cumplimiento de restricciones sobre la disponibilidad comercial o pública de alcohol a través de leyes, políticas y programas son formas importantes de reducir el uso nocivo del alcohol. Dichas estrategias proporcionan medidas esenciales para prevenir el fácil acceso al alcohol por parte de los jóvenes y otros grupos vulnerables y de alto riesgo.
Los usuarios de las carreteras afectados por el alcohol tienen un riesgo significativamente mayor de verse involucrados en un siniestro vial. La promulgación de leyes estrictas sobre la conducción bajo los efectos del alcohol y el cumplimiento de los límites de concentración de alcohol en sangre mediante puntos de control de sobriedad y pruebas de aliento aleatorias ayudarán a cambiar el rumbo.
Los profesionales de la salud tienen un papel importante en ayudar a las personas a disminuir su consumo de alcohol o a dejar de beber para reducir los riesgos para la salud, y los servicios de salud deben brindar intervenciones efectivas para quienes necesitan ayuda y sus familias.
Las prohibiciones y las restricciones integrales sobre la publicidad, el patrocinio y la promoción del alcohol son medidas costo efectivas y de gran impacto. La promulgación y el cumplimiento de prohibiciones o restricciones integrales sobre la exposición a ellos en el mundo digital traerá beneficios para la salud pública y ayudará a proteger a los niños, adolescentes y abstemios de la presión para comenzar a consumir alcohol.
Las políticas de impuestos y precios sobre el alcohol son de las medidas de control del alcohol más efectivas y rentables. Un aumento de los impuestos especiales sobre las bebidas alcohólicas es una medida probada para reducir el uso nocivo de alcohol y proporciona a los gobiernos ingresos para compensar los costos económicos del uso nocivo de alcohol.