El trasplante renal de un adolescente cubano

La Habana, 12 de octubre de 2020 (OPS/OMS) - Uno de los últimos trasplantes renales ejecutados en el Pediátrico de Centro Habana, en Cuba, se realizó a un adolescente de 16 años. Su historia te la presentamos con las propias palabras de su mamá, Irina Del Rosario Aguirre:

"Estoy muy contenta de que ya mi niño sea saludable. Ahora él puede tener una dieta liberada, y puede tomar agua toda la que quiera. No como antes, que estaba restringido. Podía tomar 3 onzas de agua nada más. No podía comer las cosas que él quería, lo que le gusta a todos los niños: galleticas, chocolates. Nada de eso él podía hacer."

Sin embargo, al segundo día de estar trasplantado, se empezó a sentir muy bien. La ambición de él siempre ha sido tomar agua. Antes del trasplante se la ´robaba´, se la ´robaba´ del refrigerador, de donde fuera que la encontrara. Su doctor se la pasaba regañándolo por eso. Hasta que por fin llegó la oportunidad del trasplante.

Yo estoy muy agradecida con todos los médicos y las enfermeras que me han brindado su apoyo para lograr esto. Y estoy muy feliz de que mi niño pueda empezar a tener una vida normal. Él ahora quiere ser enfermero de hemodiálisis, es lo que le gusta. Le hemos preguntado si no quisiera ser otra cosa, pero no. Y yo haré todo lo posible para ayudarlo si es eso lo que él quiere".

En el marco de la celebración en Cuba del Día del Donante de Órganos y Tejidos, y de la XIX Reunión de la Red Consejo Iberoamericano de Donación y Trasplante, que tuvo lugar en noviembre del pasado año, se conoció que en la isla el trasplante renal se inició en 1970. Desde entonces se han realizado más de 3 000 trasplantes de este tipo. En niñas y niños se comenzó a hacer ese procedimiento en hospitales de personas adultas. No fue hasta 1988 que se realizó por primera vez en un hospital pediátrico, y actualmente existen en el país más de 300 menores de edad trasplantados.