Ciudad de México, 01 de julio de 2025- La obesidad y las enfermedades no transmisibles (ENT) relacionadas con una alimentación inadecuada representan un problema de salud pública en los países de la región de las Américas, entre ellos México, país sede del Taller sobre la implementación y aplicación de las regulaciones de etiquetado frontal y las regulaciones de promoción y publicidad de alimentos y bebidas.
Durante la apertura del taller, programado del 1 al 3 de julio, el representante de la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS) en México, dio la bienvenida a las 35 personas participantes de forma presencial (Argentina, Brasil, México, Perú y Uruguay), y virtual (Chile, Colombia), provenientes de siete países, para revisar los mecanismos de implementación y aplicación existentes de las normativas del etiquetado frontal de advertencia (EFAN) y la promoción y publicidad de alimentos y bebidas en los países.
“El etiquetado ha demostrado tener muy buenos resultados para la salud de las poblaciones, pero es importante seguir avanzando para que todos tengamos más información del tipo de productos que consumimos”, agregó.
La jefa de la Unidad de Factores de Riesgo y Nutrición de la OPS, Vanessa García Larsen, dijo que el taller fue diseñado y organizado para fortalecer la capacidad técnica de los Estados Miembros de la OPS y que esta reunión promueve el intercambio de las experiencias en la implementación y aplicación de las regulaciones para apoyar a los países a superar los desafíos comunes y ayudarlos en el desarrollo de hojas de ruta específicas y así fortalecer los mecanismos de implementación y cumplimiento de las regulaciones del EFAN y la promoción y publicidad de alimentos y bebidas.
Señaló que “todavía persisten desafíos importantes que afectan tanto la implementación y como el cumplimiento de las mejores prácticas del etiquetado frontal de advertencia nutricional y las regulaciones de la promoción y la publicidad de alimentos y bebidas, incluidos los obstáculos promovidos por la industria alimentaria”.
El consumo excesivo de azúcares, grasas y sodio es un problema de salud pública que se asocia a las enfermedades no transmisibles que más afectan a la población: sobrepeso u obesidad, diabetes, hipertensión arterial, enfermedades vasculares, cardíacas, cerebrales y renales, por lo que este taller resulta relevante para avanzar en la agenda de salud.
Cabe destacar que México tiene una de las políticas más alineadas con la evidencia, mejores prácticas y recomendaciones de la OPS. Lo cual incluso resultó en un reconocimiento de las Agencias de Naciones Unidas por medio del Premio brindado por la Grupo de Tareas Interinstitucional de las Naciones Unidas sobre la Prevención y el Control de las Enfermedades No Transmisibles al país en 2020, por la aprobación de la NOM-051.
A nombre del secretario de Salud, David Kershenobich, la titular de la Subdirección de Políticas Intersectoriales en Salud, Zaira Valderrama Álvarez, agradeció el acompañamiento técnico y compromiso de la OPS en este tipo de iniciativas y reafirmó el compromiso del país para beneficio de la población mexicana.
Cabe destacar que previo a este taller, el 30 de junio se realizó una reunión con autoridades nacionales de la Secretaría de Salud, instituciones académicas y sociedad civil, en el marco del Plan de Aceleración de la OMS para Detener la Obesidad. La reunión estuvo encabezada por el director general del Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades (CENAPRECE), Rafael Valdez, y la directora de Apoyo Técnico, Vanessa Vizcarra Munguía, de la Subsecretaría de Políticas de Salud y Bienestar Poblacional (SPSBP).
