Río de Janeiro, 10 de diciembre de 2025 (PANAFTOSA/SPV-OPS/OMS) – Con la adhesión de Uruguay, ya son cuatro los países incorporados al Banco Regional de Antígenos de Fiebre Aftosa (BANVACO), a través de sus Servicios Veterinarios Oficiales. En el caso de Uruguay se incorpora a través del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca – MGAP. Brasil está representado por el Departamento de Sanidad Animal del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAPA); Ecuador, por la Agencia de Regulación y Control Fito y Zoosanitario (AGROCALIDAD) y Paraguay, a través del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Animal (SENACSA). Forma parte también de la Comisión Directiva, el Grupo Interamericano de Erradicación de la Fiebre Aftosa (GIEFA).
El BANVACO, gestionado por la Organización Panamericana de la Salud (OPS), mediante su Centro Panamericano de Fiebre Aftosa y Salud Pública Veterinaria (PANAFTOSA/SPV), que brinda soporte a los programas nacionales de prevención y erradicación de la fiebre aftosa en el marco del Plan Hemisférico de Erradicación de la Fiebre Aftosa (PHEFA), tiene como objetivo principal garantizar un suministro oportuno y seguro de antígenos y vacunas para contener eventuales brotes de la fiebre aftosa (FMD) mediante la vacunación de emergencia.
Si bien el continente americano está cerca de la erradicación de la fiebre aftosa, la enfermedad aún está presente en más de cien países, especialmente en África y Asia. Por ese motivo, la preparación sigue siendo esencial, ya que un brote podría comprometer la seguridad alimentaria nacional, el desarrollo socioeconómico y el bienestar de las comunidades afectadas.
La fiebre aftosa es una enfermedad viral altamente contagiosa que afecta a animales de pezuña hendida, como bovinos y porcinos. Aunque no representa un riesgo para la salud humana, su introducción provoca un impacto socioeconómico significativo en las comunidades rurales afectadas, con pérdidas que pueden ascender a miles de millones de dólares en los países impactados.
El BANVACO no comprende una instalación física ni tampoco una personalidad jurídica, sino que su coordinación técnica y administrativa se realiza a través de PANAFTOSA/SPV. El stock de antígenos y vacunas será almacenado en las instalaciones de los laboratorios proveedores mediante contratos específicos aprobados y financiados por los países miembros.
Bolivia se encuentra también en proceso de adhesión, y una vez concluido se convertirá en el quinto componente. Su incorporación fue aprobada en sesión plenaria por todos los miembros del BANVACO.
