
Ciudad de México, 23 de junio de 2025- La muerte súbita cardíaca es una de las principales causas de mortalidad a nivel global y nacional. Actuar en los primeros minutos tras el evento es crítico para salvar vidas, y los espacios cardioprotegidos permiten una respuesta inmediata y efectiva, por ello, México busca fortalecer sus capacidades y promueve mejores prácticas sobre espacios cardioprotegidos.
Durante la inauguración del Seminario de Mejores Prácticas sobre Espacios Cardioprotegidos y en representación del subsecretario de Políticas de Salud y Bienestar Poblacional (SPSBP), Ramiro López Elizalde; la directora de Apoyo Técnico, Vanessa Vizcarra Munguía, señaló que la Secretaría de Salud, a través de la SPSBP, reafirma su compromiso para impulsar acciones para atender la muerte súbita, un problema de salud pública, por lo que celebró esta reunión presencial y virtual que reunió a 260 participantes, personal de salud de todo el país.
Agregó que el objetivo de este seminario es concientizar a los tomadores de decisiones acerca del impacto de los espacios cardioprotegidos para promover la adopción de las mejores prácticas sobre la prevención y el control de las enfermedades cardiovasculares y mejorar desempeño de los servicios de salud a través del mejor control de la hipertensión y la promoción de la prevención secundaria con énfasis en la atención primaria de salud.
De acuerdo con el representante de la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS) en México, José Moya Medina, “los espacios cardioprotegidos son una medida concreta de salud pública, que incluye la instalación de desfibriladores externos automáticos (DEA) y la capacitación en reanimación cardiopulmonar (RCP), alineados con el enfoque de atención primaria y respuesta comunitaria promovido por la OPS/OMS”.
La OPS/OMS promueve la prevención de enfermedades no transmisibles (ENT), como las cardiovasculares, mediante políticas públicas efectivas, entornos saludables y sistemas de salud fortalecidos y los espacios cardioprotegidos forman parte de esa estrategia integral.
La encargada del Secretariado Técnico del Consejo Nacional para la Prevención de Accidentes, Estrella Albarrán Suárez, informó que seis de los 32 estados cuentan con su propia Ley de Cardioprotección y en cinco más continúan con esfuerzos sobre iniciativas de ley para lograr la implementación de espacios cardioprotegidos tales como Aguascalientes, San Luis Potosí, Durango, Puebla, Hidalgo, Nayarit, Tamaulipas y Tijuana.
El coordinador del Servicio Nacional de Salud Pública (SNSP), Andrés Castañeda Prado, dijo que en México se estima que cada año mueren 33,000 personas por muerte súbita cardiaca por lo que “la cardioprotección es una estrategia intersectorial que requiere del trabajo conjunto”, dijo.
Agregó que el SNSP está comprometido con: impulsar la capacitación de primeros respondientes; fomentar la instalación de desfribriladores externos automáticos; articular esfuerzos para una legislación federal robusta; y construir una cultura del cuidado y la prevención.
Durante la agenda de trabajo de este seminario, se abordaron temas como: legislación y normativas nacionales sobre espacios cardioprotegidos; logística de los pacientes con parada cardiaca; qué es un DEA; primeros auxilios; prevención de eventos de muerte súbita cardiaca; entre otros, con el objetivo de promover el fortalecimiento de las capacidades del personal de salud y primeros respondientes.