Más que una Cuestión de Peso

Obesidad

En marzo, mes de concientización sobre la obesidad, se nos presenta la oportunidad de reflexionar sobre un desafío de salud global que afecta a millones de personas en todo el mundo. Más que simplemente una cuestión de peso, la obesidad es un problema multifacético que abarca aspectos físicos, emocionales, sociales y económicos. Este día no solo nos llama a reconocer la magnitud del problema, sino también a tomar medidas concretas para abordarlo de manera efectiva.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2022, aproximadamente 1 de cada 8 personas en todo el mundo tenía obesidad. Desde 1990, la obesidad en adultos se ha más que duplicado a nivel mundial, y la obesidad en adolescentes se ha cuadruplicado. Durante el 2022, el 43% de los adultos de 18 años o más tenían sobrepeso, mientras que el 16% vivían con obesidad.. En Guatemala, la situación es similar. En 2016, la prevalencia de sobrepeso y obesidad entre adultos era del 61.5% en mujeres y del 53.1% en hombres, lo que representa un aumento del 11% desde el año 2000[1]. Según las proyecciones globales de obesidad para 2024, se estima un crecimiento anual del 3.5% en adultos y del 3.1% en niños en Guatemala[2].

La obesidad no es solo cuestión de apariencia, es una condición compleja que puede tener graves repercusiones en la salud. No se trata solo de tener unos kilos de más, sino de tener un exceso de grasa que puede desencadenar problemas como la diabetes tipo 2, enfermedades cardíacas y hasta aumentar el riesgo de ciertos tipos de cáncer. Además, la obesidad puede afectar la calidad de vida de una persona, dificultando actividades tan simples como dormir o moverse con facilidad. En Guatemala y en todo el mundo, estas enfermedades relacionadas con la obesidad están en aumento y se están convirtiendo en algunas de las principales causas de muerte. Las enfermedades cardiovasculares, la diabetes, las enfermedades renales y el cáncer están entre las 10 primeras causas de muerte en el país.

Sin abordar la obesidad, será difícil alcanzar la meta de reducir en un 30% la mortalidad prematura por enfermedades no transmisibles para el año 2030, así como también será complicado acabar con la desnutrición en niños menores de 5 años, ya sea por bajo peso o sobrepeso. Estos son dos objetivos fundamentales de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). A nivel mundial, se observa que los países no han logrado cumplir con estas metas propuestas, lo que resulta en oportunidades perdidas y en la pérdida de vidas.

El sobrepeso y la obesidad pueden ser prevenidos en gran medida a nivel individual. Las personas pueden reducir su riesgo limitando la cantidad de grasas y azúcares que consumen, aumentando el consumo de frutas, verduras, cereales integrales y frutos secos, y realizando actividad física regularmente. Sin embargo, los hábitos alimenticios y de actividad física están en gran medida influenciados por condiciones ambientales y sociales que pueden limitar las opciones personales. Por lo tanto, es esencial proporcionar información y apoyo a la comunidad para que puedan tomar decisiones más saludables.

El tiempo apremia y el desafío es complejo, por ello, los países en la 75.ª Asamblea Mundial de la Salud, en 2022, adoptaron nuevas recomendaciones para la prevención y el tratamiento de la obesidad y aprobaron el Plan de Aceleración de la OMS para Detener la Obesidad[3], diseñado para estimular y apoyar la acción multisectorial a nivel nacional en todo el mundo, adoptando políticas basadas en la evidencia. Este plan ofrece la perspectiva de un cambio radical en la ejecución y el impacto en el esfuerzo por abordar la creciente crisis de la obesidad.

La OMS hace un llamado a políticos, donantes y comunidades para unirse en una respuesta integral ante una de las crisis sanitarias emergentes más graves del mundo. En este contexto, la primera área de enfoque del plan consiste en identificar medidas prioritarias para lograr un mayor impacto en la prevención y gestión de la obesidad a lo largo de la vida. Esto implica adoptar un conjunto de intervenciones prioritarias que aborden tanto la alimentación saludable como la actividad física en diversos entornos. Estas medidas incluyen regulaciones para proteger a los niños de la comercialización de alimentos y bebidas no saludables, políticas de impuestos y precios orientadas a promover dietas saludables, políticas de etiquetado nutricional y políticas escolares sobre alimentación y nutrición, que también podrían incluir iniciativas para regular la venta de productos poco saludables cerca de las escuelas, entre otras acciones clave.

En Guatemala, propuestas como la iniciativa No. 5504, que busca aprobar una ley de promoción de alimentación saludable, están sólidamente fundamentadas y alineadas con los compromisos adquiridos por los países en la Asamblea Mundial de la Salud. Esta ley se basa en evidencia científica y tiene como objetivo ayudar a que la población tome decisiones más informadas y saludables sobre los productos procesados y ultra procesados y bebidas que consume. Estas iniciativas son cruciales y se complementan con otras medidas, como el aumento de impuestos, políticas escolares de nutrición, intervenciones contra el estigma y la discriminación, políticas para fomentar la actividad física y la mejora del acceso a alimentos saludables. Todas estas acciones son claves para detener la obesidad y el sobrepeso en el país.

El Día Mundial de la Obesidad nos recuerda la importancia de trabajar juntos para abordar este desafío de salud global. Esto puede significar hacer cambios en las políticas públicas para que se promuevan entornos más saludables, o crear espacios y programas comunitarios que enseñen sobre nutrición y ofrezcan la oportunidad de llevar una vida mas saludable. Al unirnos en este esfuerzo, podemos trabajar hacia un futuro donde todos tengan la oportunidad de vivir vidas saludables y activas.

 

[1] ENLACE: Portal de Datos sobre Enfermedades No Transmisibles, Salud Mental y Causas Externas Sobrepeso y Obesidad. https://www.paho.org/en/enlace/overweight-and-obesity

[2] World Obesity Federation. World Obesity Atlas 2024. London: World Obesity Federation, 2024. https://data.worldobesity.org/publications/?cat=22  

[3] 75.ª ASAMBLEA MUNDIAL DE LA SALUD A75/10 Add.6. Seguimiento de la declaración política de la tercera reunión de alto nivel de  la Asamblea General sobre la prevención y  el control de las enfermedades no transmisibles. https://iris.paho.org/handle/10665.2/4627