• Displaced mother and child in shelter

Atención a los desplazados en Haití: superando desafíos de salud en medio de la escalada de violencia armada

Marie-Lore, una madre de 26 años con tres hijos, mira a sus pequeños con desesperación. Su casa en Delmas fue reducida a cenizas por grupos armados, obligándola a huir sin nada más que una pequeña bolsa. Su hijo fue rescatado de las llamas por un vecino, pero ahora, en un refugio temporal en Puerto Príncipe, Haití, junto a cientos de otras familias desplazadas, lucha por mantener a sus hijos sanos y seguros. “Ojalá tuviéramos acceso a agua limpia para poder mantenernos a salvo y aseados”, dice.

Al igual que Marie-Lore, Dama, de 29 años, también huyó de su casa en Puerto Príncipe, después de que fuera destruida por la violencia. Ahora vive con sus cuatro hijos en una escuela convertida en un sitio para personas internamente desplazadas, en condiciones precarias. “No me gusta esta vida”, dice, señalando la falta de alimentos y el riesgo constante de enfermedades en los refugios sobrepoblados. “Mi hijo ha tenido fiebre desde hace días y no puedo permitirme llevarlo al hospital. Temo que pueda contagiarse de cólera por las condiciones en las que estamos.”

Las voces de Marie-Lore, Dama y muchas otras personas relatan la actual crisis humanitaria de Haití, provocada por la escalada de violencia y el desplazamiento generalizado.


Acceso al agua y la higiene: una prioridad vital

La situación humanitaria de Haití se ha vuelto cada vez más grave en los últimos meses. En noviembre de 2024, la reanudación de la violencia por parte de grupos armados en la capital, Puerto Príncipe, y sus alrededores, desplazó a más de 300.000 personas, elevando el número total de haitianos desplazados a más de un millón, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM). Barrios enteros han sido destruidos, dejando a las familias sin hogar, ingresos o acceso a las necesidades básicas.

La escalada de violencia también ha provocado el cierre del 39% de los centros de salud, incluidos dos de los tres principales hospitales de la ciudad. El acceso a la atención sanitaria nunca ha sido tan limitado.

Para hacer frente a esta situación, la Organización Panamericana de la Salud (OPS), en colaboración con el Ministerio de Salud Pública y Población de Haití (MSPP) y otros socios humanitarios, están trabajando para priorizar el acceso al agua potable y al saneamiento.

En noviembre de 2024, la OPS/OMS donó más de 3,5 toneladas de suministros, incluidas tabletas de purificación de agua, jabón y kits de higiene, para ayudar a las comunidades más vulnerables.

Además de distribuir suministros esenciales, la OPS/OMS ha capacitado y desplegado a más de 30 higienistas para realizar actividades de saneamiento, distribuir tabletas de purificación de agua y proporcionar información vital sobre prácticas de higiene y protección a quienes viven en los campamentos de desplazados internos. La Organización también ha apoyado el despliegue de equipos de vigilancia epidemiológica para detectar, notificar y responder a brotes de enfermedades infecciosas, así como 15 clínicas móviles con médicos, enfermeros y farmacéuticos. Desde noviembre de 2024, estas clínicas brindaron servicios de salud esenciales a casi 3.200 personas recientemente desplazadas y realizaron más de 11,600 consultas médicas en 2024.


Salud materna: una crisis oculta

Además de la mayor exposición a enfermedades infecciosas como el cólera, los riesgos desproporcionados para la salud a los que se enfrentan las mujeres y los niños son especialmente preocupantes. Muchas madres primerizas o embarazadas se encuentran entre las personas desplazadas y carecen de acceso a servicios de salud esenciales tanto para ellas como para sus recién nacidos.

Para abordar estas preocupaciones urgentes, la OPS/OMS colabora con el MSPP para garantizar la presencia de parteras en los sitios. En los últimos dos meses, estas parteras monitorearon a 27 mujeres embarazadas en 10 sitios de desplazados internos y refirieron a 18 de ellas al hospital para el parto o para abordar complicaciones relacionadas con el embarazo. En 2024, se realizaron 3,406 partos, incluidas 1554 cesáreas, en 3 hospitales en Puerto Príncipe (HUP, Eliazar Germain y Fontaine), apoyados de la OPS/OMS.

Un llamado urgente a la acción

Se calcula que 4,2 millones de personas necesitarán asistencia sanitaria en Haití en 2025, por lo que la situación es cada vez más desesperada. Esto se ve agravado por una falta de financiamiento para apoyar la respuesta humanitaria en salud. La OPS/OMS ha solicitado 18,5 millones de dólares en fondos para sustentar sus operaciones y continuar brindando servicios de salud esenciales en el próximo año.

"A pesar de los esfuerzos de la OPS y otros organismos, las amenazas a la salud y la seguridad humana, así como a la seguridad nacional, son devastadoras. El apoyo y la colaboración sostenida siguen siendo fundamentales mientras continúa el esfuerzo por salvar vidas y restaurar los servicios de salud", dijo el Dr. Oscar Barreneche, representante de la OPS/OMS en Haití. "Con el financiamiento actual a punto de agotarse a finales de mes, la urgencia de asegurar recursos adicionales es mayor que nunca."

Las operaciones de respuesta de la OPS han sido posibles gracias a colaboraciones con socios como el Fondo Central de Respuesta a Emergencias de las Naciones Unidas (CERF, por sus siglas en inglés), el Ministerio de Asuntos Exteriores de Alemania y la Unión Europea (DG ECHO).