Agosto 2025
Cuando Resa Eustace, enfermera titulada y partera certificada de San Vicente y las Granadinas, dio la bienvenida a su primer hijo, decidió amamantarlo, pensando que sería algo sencillo. Sin embargo, los primeros días de lactancia se convirtieron en algunos de los momentos más difíciles de su vida.
“Pensaba que amamantar era simplemente acercar mi pecho a la boca de mi hijo y que él succionaría”, recuerda Resa.
“Pero no conocía las técnicas para ayudarlo a engancharse bien o estimular mi flujo de leche. Fue muy duro, y por momentos, diría que incluso fue un momento depresivo para mí”.
Su leche tardó más de lo esperado en “bajar” —como dicen localmente, “aún no llegaba”— y, al no lograr que su recién nacido se enganchara correctamente, él presentó niveles bajos de azúcar en sangre, una complicación que no había previsto.
“Ojalá hubiera conocido antes la importancia y los beneficios de la lactancia materna, y tenido las habilidades necesarias”, afirma.
Ahora, como partera certificada, Resa anima a las madres primerizas a buscar apoyo sin dudarlo.
“No estás sola. Acude a tu partera, a tu médico o a otras madres con experiencia. Busca el apoyo que necesitas y no te rindas, la ayuda está ahí”.
