El director de la OPS defiende un “abordaje integral y articulado de las políticas públicas” para promover la salud y el bienestar en la región

Participantes del evento de OPS y CEPAL

La Organización Panamericana de la Salud (OPS) coorganiza en Chile el seminario ‘Construcción de la intersectorialidad en el territorio: pasar de la teoría a la práctica’, para avanzar en la agenda de intersectorialidad y salud.

Washington, D.C., 29 de agosto de 2025 ― La Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) organizaron el 21 y 22 de agosto en Santiago el seminario Experiencia de la Gestión Sociosanitaria en el nivel local en Chile. Construcción de la intersectorialidad en el territorio: pasar de la teoría a la práctica. Esta jornada tuvo como objetivo generar un espacio de diálogo e intercambio entre autoridades nacionales, subnacionales y locales para compartir aprendizajes, desafíos y oportunidades en torno al desarrollo de modelos de integración sociosanitaria y de acción intersectorial para la salud. Entre ellos, se destacó la iniciativa de Gestión Social Local (GSL) en Chile como ejemplo concreto de articulación intersectorial en la provisión de prestaciones sociales integrales, incluyendo la salud.

En la apertura del encuentro, el director de la OPS, Dr. Jarbas Barbosa, recordó que “las Américas sigue siendo la región más desigual del mundo y esas desigualdades se reflejan en el acceso a los servicios y en los resultados de salud. Las inequidades que enfrentan nuestros pueblos”, añadió, “tienen raíces en los determinantes sociales, por lo que es indispensable avanzar en un abordaje integral y articulado de las políticas públicas y visibilizar experiencias innovadoras, como la integración sociosanitaria que impulsa Chile”.

“Es un modelo que demuestra que es posible pasar de la teoría a la práctica, articulando servicios sociales y de salud en el nivel más cercano a las personas”, dijo el Dr. Barbosa, que señaló que “la coordinación vertical entre los distintos niveles de gobierno es esencial para avanzar hacia una salud centrada en las personas y una protección social sensible a las múltiples dimensiones y complejidades sociales, económicas y culturales”.

El director de la OPS celebró la colaboración entre la CEPAL y la OPS, que “ha sido clave para generar respuestas integradas frente a las profundas desigualdades sociales y sanitarias en nuestra Región”.

Este seminario celebrado en Santiago de Chile tuvo también entre sus objetivos analizar los desafíos que enfrentan las políticas de salud y las políticas públicas para mejorar los resultados en salud, e identificar modelos y experiencias de acción intersectorial que contribuyan a promover la equidad en salud, y analizar las contribuciones de la integración sociosanitaria para el abordaje integral de las necesidades de la población.

La salud, desde todos los sectores

La directora del Departamento de Determinantes Sociales y Ambientales para la Equidad en Salud de la OPS, Gerry Eijkemans, recordó que “la salud se construye en nuestras casas, nuestros barrios, nuestras escuelas, nuestros municipios. Es fundamental comprender que la salud no se genera en los hospitales; en los hospitales se repara la enfermedad, pero la salud se construye en el día a día”.

Por este motivo, Eijkemans profundizó que “no habrá salud si las condiciones sociales en que viven las personas son adversas, si las garantías sociales que son necesarias para la salud y el bienestar no son accesibles para toda la población y especialmente los sectores en situación de vulnerabilidad”. “Para eliminar estas inequidades”, concluyó, “es fundamental que el trabajo entre los diferentes sectores para el abordaje de los determinantes sociales de la salud se dé con la participación activa de la población”.

Alberto Arenas, director de la División de Desarrollo Social de la CEPAL, reivindicó “avanzar en un desarrollo social inclusivo que coloque en el centro a las personas y sus derechos y promueva una vida libre de pobreza y desigualdad”. Por eso, siguió, “es esencial que los países de la Región fortalezcan su compromiso por la salud universal, con sistemas de salud integrales, sostenibles y resilientes”.

En la misma línea que Eijkemans, Arenas señaló que “la salud de la población no se decide sólo en el ámbito de la salud”, y resaltó el papel crucial “que tienen los determinantes sociales en la salud y el bienestar de las personas, es decir, aspectos como el acceso al agua y saneamiento, la formalidad del empleo, el acceso a la educación de calidad o las políticas macroeconómicas”.

Estrategia de la OPS

La jefa de la Unidad de Promoción y Determinantes Sociales de la Salud de la OPS, Orielle Solar, defendió la relevancia del enfoque intersectorial para la salud y el bienestar y recordó que “la acción coordinada entre sectores gubernamentales, incluyendo a veces la sociedad civil y el sector privado, busca alcanzar objetivos que serían difíciles de lograr por un solo sector”.

De este modo, dijo, el enfoque intersectorial “busca influir en políticas públicas, mejorar la eficiencia y abordar determinantes sociales en la salud, considerando el impacto de otras políticas en la salud y el bienestar”.

“El trabajo intersectorial enfrenta el desafío de alinear diversos intereses sectoriales hacia un objetivo común, buscando resultados e impacto en la reducción de desigualdades en salud. Es crucial que todos los sectores incluyan la salud como un objetivo en sus políticas, y que el sector salud integre las prioridades de otros sectores”, explicó Solar.

La jefa de la Unidad de Promoción y Determinantes Sociales de la Salud de la OPS recordó también que la OPS ha definido líneas estratégicas en este sentido, incluyendo la acción intersectorial para abordar la Agenda 2030, integrando la equidad como valor transversal. Además, se están fortaleciendo las competencias a través de capacitaciones y cursos que aborden la gobernanza, el liderazgo, los determinantes sociales y el monitoreo del trabajo intersectorial. La OPS está desarrollando una guía de monitoreo para el trabajo intersectorial y avanzar así en el desarrollo de modelos de evaluación, buscando sistematizar experiencias y buenas prácticas.

El representante de la OPS en Chile, Giovanni Escalante, defendió la relevancia del abordaje de los determinantes sociales de la salud y del enfoque intersectorial y mencionó el reciente informe mundial de la OPS y la OMS sobre los determinantes sociales de la salud. “Éstos pueden reducir drásticamente la esperanza de vida saludable, llegando en los casos más extremos a diferencias de hasta 33 años entre países, un escenario nos desafía a mirar más allá del sector salud y comprender que las políticas públicas, la participación comunitaria y la acción coordinada entre sistemas sociales son esenciales para reducir las inequidades”, dijo Escalante.

“La evidencia demuestra que, donde ha existido participación activa, asignación equitativa de recursos y voluntad política, es posible observar avances tanto en salud como en cohesión social”, destacó. Por ello, llamó a que “la gestión sociosanitaria y la atención integrada deben trascender el ámbito conceptual y consolidarse como prácticas efectivas al alcance de toda la población”.

La gestión sociosanitaria

La gestión sociosanitaria surge como un enfoque colaborativo entre sectores, como el de la salud y el de protección social, junto con la comunidad, con el objetivo de ofrecer servicios integrales de salud y bienestar. Este enfoque exige replantear los modelos actuales hacia un modelo del cuidado de la salud, equilibrando la provisión de los servicios sociales y de salud hacia una atención primaria y comunitaria, que integre la ​promoción de la salud, la prevención de las enfermedades y el bienestar social. Además, implica la creación de nuevos métodos de coordinación y de cooperación, con una cultura deliberativa que facilite y construya con una coordinación activa desde el nivel local entre los servicios sanitarios y sociales, apoyada por sistemas de información interoperables e interconectados.

En la región, la OPS ha promovido esta perspectiva integral de la salud que reconoce y enfatiza en la relación entre los resultados sanitarios y las condiciones de vida socialmente generadas, los contextos sociopolíticos, la participación de las comunidades y la equidad social.

En este contexto, se han desarrollado procesos de cooperación técnica que impulsan el abordaje intersectorial de los determinantes sociales de la salud, el fortalecimiento de la participación social y el relevamiento y movilización de los activos presentes en la comunidad. A través de la Iniciativa Especial de Determinantes Sociales para la Equidad en Salud, la OPS ha apoyado a países, así como a gobiernos subnacionales y locales en el desarrollo de estrategias intersectoriales para intervenir sobre las causas de las principales desigualdades en salud que afectan a la población.

Asimismo, la OPS ha liderado la construcción de sistemas de monitoreo de los determinantes sociales desde el nivel local, con el desarrollo de un marco analítico y metodológico para monitorear y evaluar las iniciativas y políticas de acción intersectorial para potenciar, optimizar y dar sostenibilidad a estos esfuerzos.