La Habana, agosto 2025
En el barrio Jesús María, en La Habana Vieja, la líder comunitaria Maydolis Bueno Vargas habla con convicción de una “semillita” que germinará y crecerá como un gran árbol. No se refiere a una planta, sino al proyecto semilla conocido como SAT-DENCLIM, una iniciativa que ha unido a su comunidad para prevenir el dengue.
Apoyado por el Instituto Interamericano para la Investigación del Cambio Global (IAI) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS/OMS), este esfuerzo combina la acción comunitaria con el conocimiento técnico para enfrentar una enfermedad que sigue representando una amenaza constante para la región.
SAT-DENCLIM (Sistema de Alerta Temprana del Virus Dengue y su Vector Trasmisor Sensibles al Clima, con una Acción Comunitaria) es un proyecto para la adaptación del sector de la salud ante factores ambientales y climáticos que inciden en la propagación de enfermedades transmitidas por vectores.
Su principal objetivo es anticiparse a través de un sistema de alerta temprana para la predicción del dengue que permita a las autoridades locales y a la población realizar acciones de forma preventiva y oportuna con vistas a minimizar el riesgo de transmisión.
El proyecto se desarrolló en el municipio Habana Vieja, una zona con muchas personas en situación de vulnerabilidad social; condiciones higiénico-sanitarias complejas y riesgo de inundación, al ser un área baja y cercana a la costa. Estas condiciones crean un entorno propicio para la proliferación del mosquito Aedes aegypti, transmisor del dengue.
