La OPS/OMS y la Sociedad Latinoamericana de Nefrología llaman a prevenir la enfermedad renal y a mejorar el acceso al tratamiento

Se estima que una proporción significativa de pacientes de la región no acceden a los tratamientos que pueden salvarles la vida. Ambas organizaciones promoverán estrategias para reducir esa brecha

Washington, DC, 10 de marzo de 2015 (OPS/OMS).- La Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS) y la Sociedad Latinoamericana de Nefrología e Hipertensión (SLANH) llaman a prevenir la enfermedad renal crónica y a mejorar el acceso a su tratamiento. Ambas instituciones se aliaron para promover estrategias que reduzcan la brecha que separa a los pacientes del tratamiento que puede prolongar y salvarles la vida.

La enfermedad renal crónica afecta a cerca del 10% de la población mundial. Se puede prevenir pero no tiene cura, suele ser progresiva, silenciosa y no presentar síntomas hasta etapas avanzadas, cuando las soluciones --la diálisis y el trasplante de riñón— ya son altamente invasivas y costosas. Muchos países carecen de recursos suficientes para adquirir los equipos necesarios o cubrir estos tratamientos para todas las personas que los necesitan. La cantidad de especialistas disponibles también resultan insuficientes.

"Los datos disponibles, aún insuficientes, sugieren una gran inequidad en el acceso al tratamiento para la enfermedad renal crónica en nuestra región, con una clara desventaja para los países y poblaciones con menores ingresos", señaló el asesor regional en prevención y control de enfermedades crónicas de la OPS/OMS, Pedro Orduñez, y advirtió que "si no se toman acciones para prevenirla y evitar que progrese a sus estados avanzados, más personas la padecerán y los países tendrán que lidiar con mayores costos sanitarios en el futuro".

Según datos de la SLANH, en América Latina un promedio de 613 pacientes por millón de habitantes tuvieron acceso en 2011 a alguna de las alternativas de tratamiento para la sustitución de la función que sus riñones ya no pueden realizar: hemodiálisis (realizada por una máquina), diálisis peritoneal (utilizando fluidos en el abdomen a través de un catéter) y el trasplante de riñón. Sin embargo, la distribución de estos servicios es muy inequitativa y en algunos países esa cifra fue menor a 200.

La OPS y la SLANH están impulsando acciones para elevar la tasa de tratamiento de sustitución de la función renal hasta 700 pacientes por millón de habitantes en cada país de Latinoamérica para 2019. "En un continente tan extenso, con importantes dificultades en el acceso, sobre todo de poblaciones alejadas de los centros de salud, debemos desarrollar más la diálisis peritoneal domiciliaria, un tratamiento seguro, efectivo y que se puede extender a muchos pacientes que hoy no están recibiendo tratamiento", puntualizó Walter Douthat, presidente de la SLANH.

La diálisis peritoneal domiciliaria se ofrece actualmente a alrededor del 12% de los pacientes en América Latina. La cifra supera el 30% en algunos países, pero en otros es aproximadamente del 6%. La SLANH promueve aumentar ese porcentaje al 20% para 2019 en cada país de la región.

"Hay muchas acciones que podemos poner en marcha para hacer más equitativo el acceso al tratamiento", sostuvo Orduñez. "Mejorar la prevención y detección temprana, fortalecer la vigilancia para conocer la situación en cada país, impulsar políticas de formación de nefrólogos y capacitar al personal de salud para hacer frente a su escasez, además de ampliar la cobertura del tratamiento, en especial, para aquellos pacientes en estados avanzados de la enfermedad", enumeró.

Adoptar un estilo de vida saludable y mejorar el tratamiento y el control de la diabetes y la hipertensión son las formas más eficaces de prevenir la enfermedad renal. También, modificar las malas condiciones de trabajo y la utilización irresponsable de agroquímicos, que serían también factores de riesgo, como se observa en comunidades agrícolas de Centroamérica.

Actividades por el Día Mundial del Riñón

Para conmemorar el Día Mundial de Riñón, la OPS/OMS y la Sociedad Latinoamericana de Nefrología e Hipertensión realizarán, el 12 de marzo, a las 11 am (hora de Washington, DC), un seminario virtual donde se abordará la situación de la enfermedad renal crónica en América Latina y el Caribe. Además, se analizará el estado de la epidemia de esta enfermedad en comunidades agrícolas de Centroamérica.

Por otro lado, la Calculadora de Riesgo Cardiovascular, una aplicación desarrollada por la OPS/OMS para ayudar a las personas y a los profesionales de la salud a conocer y controlar sus riesgos de padecer un infarto o un accidente cerebrovascular, incorporará ahora un nuevo módulo que permitirá medir el riesgo de desarrollar la enfermedad renal, lo cual espera favorecer la prevención y la detección precoz.

Sobre el Día Mundial del Riñón 2015

El Día Mundial del Riñón, impulsado por la Sociedad Internacional de Nefrología (ISN, según sus siglas en inglés) y la Federación Internacional de Fundaciones Renales (IFKF, según sus siglas en inglés), se celebra desde 2006 el segundo jueves de marzo. La celebración de esta fecha busca generar conciencia sobre la salud de los riñones y promover la prevención y la detección oportuna de la enfermedad renal crónica. Este año el lema elegido es Salud renal para todos.


Acerca de la OPS

La Organización Panamericana de la Salud (OPS) trabaja con los países de las Américas para mejorar la salud y la calidad de la vida de su población. Fundada en 1902, es la organización internacional de salud pública más antigua del mundo. Actúa como la oficina regional para las Américas de la OMS y es la agencia especializada en salud del sistema interamericano.

Acerca de la SLANH

La Sociedad Latinoamericana de Nefrología e Hipertensión (SLANH), fundada en 1970, busca mejorar la salud renal de la población de Latinoamérica, contribuir con la difusión de los conocimientos en nefrología e hipertensión y promover y orientar la formación de nefrólogos. Está integrada por las sociedades de nefrología de más de 20 países de América Latina -las cuales reúnen a la mayoría de los 8.000 nefrólogos de la región- y tiene 1.800 miembros activos.