OPS avanza en actualización de Estrategia Regional para la Prevención y Control de Enfermedades Arbovirales

OPS avanza en actualización de Estrategia Regional para la Prevención y Control de Enfermedades Arbovirales
OPS/David Spitz
Imagen

Washington DC, Estados Unidos - Del 12 al 15 de agosto, el Departamento de Prevención y Eliminación de Enfermedades Transmisibles (CDE) ha reunido en la sede a expertos regionales y de país  de  la OPS, y a más de 15 representantes de ministerios de salud de las Américas con el objetivo de actualizar la Estrategia de Gestión Integrada para la Prevención y el Control de las Enfermedades Arbovirales (EGI-Arbovirus) para un nuevo periodo 2026-2030.

Reunion sobre arbovirus

Esta estrategia, vigente desde el 2003 como EGI-Dengue y que evolucionó desde el 2016 a una EGI-Arbovirus, ha sido el marco de referencia regional para orientar la respuesta de prevención y control frente a enfermedades como el dengue, la chikunguña, zika entre otras. Sin embargo, el incremento sostenido de casos de dengue, y la aparición de nuevas enfermedades arbovirales como el Oropouche en áreas sin transmisión previa han evidenciado la necesidad de actualizaciones periódicas de esta estrategia y revisiones sistemáticas que incorporen los últimos avances tecnológicos y lecciones aprendidas en las Américas y en el mundo.

Reunion sobre arbovirus

El taller de trabajo está abordando la situación epidemiológica actual, la preparación y respuesta ante epidemias, el estado de las vacunas disponibles, así como la integración de trabajo y la incorporación de nuevas herramientas, tecnologías y metodologías en los principales componentes de la EGI-Arbovirus  (gestión, atención al paciente, manejo integrado de vectores, laboratorios, epidemiologia, comunicación y participación comunitaria.

Reunion sobre arbovirus

La actualización de la EGI-Arbovirus permitirá a los países de la Región ajustar sus estrategias nacionales y locales y fortalecer sus capacidades para la prevención y control de estas enfermedades en los próximos cinco años.

Esta estrategia servirá para reafirmarse como un modelo integrado que guía la respuesta al complejo escenario de enfermedades arbovirales en la Región.